Nuestra asistencia a la RootedCon fue una experiencia muy enriquecedora. Desde el momento en que llegamos, nos sumergimos en una atmósfera de entusiasmo y anticipación, preparadas para explorar los diversos tracks de ponencias y actividades temáticas que prometían expandir nuestros conocimientos y redes de contacto.

La diversidad de los temas abordados en las ponencias fue impresionante. Cada presentación no solo nos brindó valiosos conocimientos técnicos sino también lecciones sobre los desafíos y oportunidades dentro del campo de la ciberseguridad. Fue particularmente inspirador escuchar a ponentes apasionados compartir sus experiencias y trabajos, reafirmando nuestro compromiso con el avance profesional y la importancia de nuestra presencia en este ámbito.

Además, la RootedCon nos ofreció una excelente plataforma para interactuar directamente con empresas líderes en la ciberseguridad. Recorrer los stands, dialogar con representantes de diversas empresas y descubrir las últimas soluciones y tecnologías amplió nuestra visión de la industria y las tendencias actuales, proporcionándonos una valiosa perspectiva sobre el futuro de nuestra profesión.

El networking se reveló como uno de los pilares del evento, permitiéndonos compartir experiencias, ideas y proyectos con una comunidad diversa pero unida por un interés común en la ciberseguridad. Cada conversación, ya fuera entre ponencias o durante los momentos de descanso, se convirtió en una oportunidad para forjar conexiones significativas, algunas de las cuales anticipamos que se transformarán en colaboraciones futuras.

La temática de Pokémon añadió un elemento lúdico y memorable al evento, creando un ambiente relajado que favoreció la interacción y el disfrute entre las sesiones más técnicas. Incluso encontramos una Pokeball escondida en un track con la que pudimos participar en las batallas Pokemon.

Al reflexionar sobre nuestra experiencia en la RootedCon, es evidente que el evento fue mucho más que una serie de ponencias y talleres; fue una verdadera celebración de la comunidad, la pasión por la ciberseguridad y el poder del aprendizaje colectivo. Nos vamos no solo con conocimientos enriquecidos y nuevas amistades sino también con una red de contactos significativamente ampliada. Esta experiencia ha reafirmado nuestra determinación de seguir avanzando y contribuyendo al campo de la ciberseguridad, fortalecidas por los lazos de solidaridad y colaboración.